Nunca hubiera pensado que tendría que hacer una entrada como esta. Nunca hubiera pensado que la haría solo dos años después de la de Jonghyun.
Esta vez ha sido eficaz como un corte limpio, de un día para otro ha desaparecido y no va a volver. Ha pasado ya un semana y un día y no sé cómo me siento. El día que sucedió fue muy duro para mí. Salí del trabajo y no podía reprimir las ganas de llorar y juro que agradecí estar sola y agradecí la lluvia porque realmente así me sentía. Es una sensación muy extraña. Un día ahí estaba y luego ya no. Yo he sido fan de Sulli desde que descubrí f(x), la he seguido todos estos años, esperado cuando estaba inactiva, intentando sentirse mejor, y cuando hace poco volvió estuve contenta porque ciertamente creía que las cosas iban para mejor, que ahora las cosas por fin se encaminarían hacia cosas positivas, que ella tendría un gran futuro por delante. Pero no es posible. Con Jonghyun me pasaba que no podía entender que ya no existiera, pero es que con Sulli ni siquiera puedo pensar en el hecho de que ya no esté. O quizá me duele mucho pensarlo y entonces hago ver como que no pasa nada. Tengo la sensación como si fuera uno de aquellos momentos en los que se retiraba y luego subía alguna foto. Sigo esperando esa foto que nunca llegará. Me entristece.
Ahora la gente está reconociendo lo que involuntariamente (simplemente queriendo vivir su vida) estaba haciendo por las mujeres pero yo daría todo eso porque siguiera viva.
El problema de todo esto es que el dolor es invisible. Un tweet que te da la noticia y otro que te dice que ya está todo hecho y para el recuerdo. ¿Y cual es el duelo de aquellos que no pueden lamentarse? ¿Qué hacemos los que no podemos despedirnos?
Soy una dramática, lo sé, pero yo la quería mucho como fan y esperaba que ella fuera feliz y quería ver con quien se casaba y como serían sus hijos (si decidía tenerlos) y ahora ya nada. Ahora qué sigo haciendo interesándome por algo a lo que prácticamente solo ella me ataba. Sigo triste.
Esta vez la técnica ha sido el vacío, fingir que no existe, que este hueco que ha dejado no es real, que ella nunca fue para mí lo que realmente ha sido. Sigo siendo una dramática pero me desahogo porque no puedo llorar aunque cuando lo pienso tengo ganas. Y noto y sé que es una tristeza profunda porque no soy capaz de hablar de manera directa o hablo demasiado directamente para quitarle hierro al asunto.
Odio tener que escribir esto pero si no lo escribo ¿Cómo puedo empezar a asimilarlo? Odio estas no despedidas. Odio el odio salvage que carcome los corazones. Odio que te fuera tan fácil dejarnos atrás. No te conocí nunca, lo sé, no siento que tuviera que ser así, simplemente eras alguien a quien admiraba y a quien quería ver feliz. Pero de qué sirve todo esto si ya da igual. Todas las cosas que podrían haber sido nunca serán. Otra vez el potencial perdido. Un cuerpo y un alma que ya no son nada. Estoy triste.
Sulli, siento mucho que sintieras que esa era la solución, siento que sufrieras así. Siento no ser aún capaz de sentir la extension de tu pérdida. Espero que los buenos momentos fueran para ti un brillo de luz entre la oscuridad y que te guíen en cualquiera que sea el camino hacia lugares más felices. Te echo y te voy a echar de menos.
Espero que sepas, a pesar de todo, que has sido querida por muchos y que dejas un hueco que nunca se llenará.
Ojalá aún estuvieras aquí. Pero no estás y yo sigo triste.
Esta vez la herida es más profunda y el puñal no deja pasar el dolor.
martes, 22 de octubre de 2019
Choi Sulli
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